Para mejorar la convivencia vecinal y familiar, así como aspectos personales, la Dirección de Desarrollo Social y Humano, realizó el taller ‘Reconstruyendo Mi Paz’, en 120 colonias con la participación de 500 mujeres y hombres.
Lorena Alfaro García, presidenta municipal, destacó la gran participación ciudadana en talleres, pues eso habla del compromiso que la sociedad tiene para contribuir a la paz, por lo que le pidió a las y los participantes a continuar siendo agentes de cambio y ser solidarios y empáticos con los demás.
“Para aportar a nuestra sociedad debemos primero que nada estar bien con nosotros mismos, pues solo cuando cultivamos la paz interior podemos extenderla a quienes nos rodean, no nos vayamos tan lejos, que estemos bien nosotros mismos para poder estar bien en casa, con la familia, así es que esta es la parte que tenemos que reflexionar con este taller”, compartió.
Agustín Barbosa Hernández, participante del taller, resaltó la realización de esta actividad, pues para él le ayudó a controlar sus emociones, debido a que era muy impulsivo y encontró el camino para canalizar sus impulsos y ser más tranquilo.
“Más allá de mi persona, soy porta voz de todas las mujeres y poquitos hombres que habemos en este lugar, con la intención creo de mejorar nuestra ciudad, yo recuerdo que en una de las pláticas les decía que el problema no son las autoridades, el problema somos nosotros que somos padres y no sabemos educar a los hijos, los hijos no se van a educar a la escuela, se educan en la casa”, mencionó.
Gema Catalina Rico Lemus, capacitadora del taller ‘Reconstruyendo Mi Paz’, celebró la conclusión de este proyecto que simboliza eperanza, compromiso y transformación para la comunidad, pues se cuenta con 500 voluntades renovadas, con herramientas para sembrar armonía y construir la comunidad más solidaria y justa.
“Hoy llegamos a 120 colonias trabajando la reconstrucción de la paz, gracias a la union de todos, en estas semanas no solo hemos aprendido técnicas y herramientas, hemos refleccionado sobre nuestras emociones, construyendo redes de apoyo comunitario, fortaleciendo nuestra capacidad para resolver conflictos, hemos reconstruido nuestra paz interior y,con ello, nos hemos convertido en agentes de cambio que promoveran la paz de Irapuato”, finalizó.